Este miércoles la autoridad sanitaria decretó la clausura total de un inmueble que operaba como residencial, ubicada en 14 de febrero al llegar a Maipú, pleno centro de Antofagasta y que a pesar de haber sido fiscalizada hace menos de un mes, quedando con prohibición de funcionamiento, el propietario de origen chino seguía recibiendo pasajeros.

Los vecinos del sector, ya habían alertado a la Gobernación, incluso habían hecho llegar videos e imágenes con el constante ingreso de personas que pernoctaban en ese domicilio, que no cuenta con patente municipal, inicio de actividades comerciales y tributarias y menos la autorización sanitaria para el funcionamiento de la residencial.

El Gobernador Nalto Espinoza, en compañía de funcionarios de la Seremi de Salud, Carabineros y PDI, fiscalizó por segunda vez las condiciones higiénicas y de seguridad para los pasajeros, observaciones que aún se mantienen y que no fueron subsanadas anteriormente por parte del propietario.

DENUNCIA ANTE FISCALÍA
El Gobernador Espinoza explicó que “gracias a las denuncias de los vecinos del sector, pudimos detectar que este local, este recinto, ubicado en 14 de febrero 2352, a pesar de tener una prohibición de funcionamiento establecida por la autoridad sanitaria, continuó funcionando y vulnerando la disposición de la autoridad, por lo tanto, hemos venido con Carabineros, PDI y la autoridad sanitaria, hacer un segundo procedimiento.
Encontramos cinco personas en el interior, dos venezolanos, un boliviano y dos chilenos, y por lo tanto se ha tomado la determinación de clausurar definitivamente el local y vamos a presentar los antecedentes a la Fiscalía Regional, a objeto que se siga el proceso correspondiente, para que se establezcan las sanciones que en definitiva terminen con este tipo de prácticas en este lugar”.

ATENTADO CONTRA LA SALUD
El pasado 15 de abril, en la primera fiscalización a la residencial clandestina, se constató la presencia de baratas y fecas de ratón en las habitaciones, cocinas y baños. Aguas grises estancadas en los sanitarios y duchas obstaculizadas. Presencia de desechos orgánicos esparcidos por el lugar, falta de aseo en cocinas y mesones acondicionados para la manipulación de alimentos. La residencial no contaba con extintores, sistema de emergencia ante cortes de energía y la única entrada y salida ante evacuación, se encontraba obstaculizada por colchones, muebles y además el recinto había sido afectado por un incendio por falla eléctrica precisamente en su entrada, poniendo en grave riesgo la seguridad de las personas y de las casas colindantes.

Esta nueva fiscalización dejó en evidencia que ninguna de estas graves observaciones, fueron subsanadas, de hecho el propietario de la residencial, ni siquiera acudió a presentarse ante la Seremi de Salud.

Pedro Morán de la Unidad de Salud Ocupacional de la Seremi de Salud de Antofagasta, aseveró que “se procedió a la clausura de este establecimiento, ya que revestía un alto riesgo para la salud y la seguridad de las personas. Previamente el 15 de abril se había realizado una prohibición de funcionamiento, por las mismas condiciones y ahora se procedió a una clausura, por el incumplimiento de las subsanaciones anteriormente descritas“.

Tras la clausura del inmueble, se solicitó a los pasajeros, hacer abandono del recinto.